miércoles, 6 de marzo de 2019

Nostalgias

No volverán, lo sabemos.
Vamos perdiéndolo todo.
Cuando elegimos el modo
fue con ausencias y extremos.
Ni serviles ni blasfemos
—éramos libres, conscientes—; 
si hoy apretamos los dientes
es por amor. La memoria
nos condena. No hay historia
para las manos ausentes.