Tan solo por unos días
estaré de vacaciones
(aunque sé que los ladrones
siguen con sus fechorías).
Continuarán sus porfías
los de siempre -los canallas-;
resistirán las murallas
-como siempre- de los buenos,
y entre caricias y truenos
se mantendrá la batalla.
Iré a cargar energía,
a afilar lanzas y pluma,
a sacudirme la bruma
y a inventarme un nuevo día.
Carcajadas y alegría
beberé -tan desmedido-
que no dejaré bandido
ni títere con cabeza,
¡para cortar la maleza
volverá El Entrometido!