lunes, 31 de enero de 2011

¡No te nos mueras, Mandela!

Esta es la fuerza de un grito
de quienes saben que el hombre
es mucho más que su nombre,
su voz, su tiempo, su rito.
El hombre es el infinito
que mira y que lo desvela,
es la invencible candela
que enciende la libertad,
es la inmensa humanidad
de ese gran Nelson Mandela.