domingo, 8 de diciembre de 2019

Plegaria

Señor de los altos cielos
y de la revelación,
aunque ateo, la ocasión
se presta para desvelos.
Si yerro en mis desconsuelos
y reparas almas rotas,
por mis abuelas devotas
hasta el último latido,
solo un milagro te pido:
¡Líbranos de los idiotas!