miércoles, 16 de noviembre de 2022

Desayunística historia de amor

Él, de café con tostada;
ella, de croissant con té;
él, apurado, de pie,
y ella, serena, sentada.
Él, con tarjeta dorada
y ella, siempre «en efectivo»;
de pronto se dio un motivo:
¡La tarjeta rebotó!
Y ella dijo: “Invito yo”.
Él sonrió, receptivo.