domingo, 4 de noviembre de 2018

Hermafrodítica historia de amor

Salmacis y Hermafrodito
no se amaron. Fue el deseo
de la ninfa —su trofeo—
lo que dio origen al mito.
Él huía, pegó el grito
la mujer —bella ladrona—
pidio al Olimpo encerrona.
Los dioses, por complacerla,
juntaron sus —pez y perla—
sexos en una persona.