jueves, 4 de abril de 2024

Triste Perú

Así le pasó a Al Capone,
los impuestos no pagados
lo arruinaron. Que hay pecados
que no hay Dios que los perdone.
¡Triste Perú! Se dispone,
feroz, a juzgar entuertos
por los relojes de inciertos
orígenes, pero nada
se dice de la olvidada
lista de cincuenta muertos.