Se juega en el Medio Oriente
la paz, la sed y el futuro;
se viene un tiempo muy duro
y ha de sufrir mucha gente.
Parece que es eminente
una guerra (o dos o tres)
y se acentúa el estrés
(y el odio y la desconfianza)
y, feliz, la muerte avanza
sin dudas y sin traspiés.
[la noticia]