Se juntan el Sur y el Norte,
la feliz capitalista
y la hambrienta comunista
(pero nuclear). ¡Qué aporte!
¿Serán príncipe y consorte?
¿Se unificarán un día?
¡Quién sabe! Tal vez podría
hablarse de conveniencia...
¡Qué negra y sucia conciencia
la de mi urgente ironía!