Yo ni siquiera sé que no sé nada;
no lo sé yo, tampoco mi vecina,
eso de la cultura nos arruina
la digestión bucólica y honrada.
Un guerrero maneja bien la espada,
la forjen en Toledo o en la China;
yo navego en feisbúk y la rutina
del logaritmo doy por ignorada.
Nada importan los cómo si los cuánto
son los que marcan dignidad y renta,
"tanto tienes, entonces vales tanto".
La cultura es inútil; cenicienta
curada ya del susto y del espanto
sabe que el monto es todo lo que cuenta.